El Papa y Terry.

El Papa y Terry. Jesús H. González de León.

El Papa Juan Pablo II fue único. Será recordado con un cariño por la humanidad y en especial por los mexicanos. El llamado Papa viajero visitó muchos países. El primero de ellos fue México recién inicio su pontificado. En total vino 5 ocasiones y en cada una demostró alegría y un afecto que le fueron correspondidos. Quienes lo vieron difícilmente pueden describir la emoción y el impacto que producía estar cerca de el. Frases que quedaron grabadas en nuestro corazón:. “México, siempre fiel” “¡No tengan miedo!” Canonizo a indígenas como Juan Diego. A donde fue abrió brecha, México no fue la excepción: Las relaciones Iglesia estado eran distantes, al principio los presidentes no lo recibian como jefe de Estado. Espero que el Papa no se haya enterado que nos quemaron el Cristo del cerro de las Galeras, porque se hubiera preocupado.
El Papa deja un legado prodigo en obras. Supo pedir perdón por los errores de la Iglesia. También supo perdonar a quien intentó asesinarlo en 1981. A lo largo de su pontificado elaboró 14 cartas encíclicas, con temas sobre el trabajo, problemas modernos, las nuevas cosas, la fe y la razón, En 1995 creo la importante encíclica Evangelium Vitae sobre el valor y el carácter inviolable del a vida humana. En ella, Juan Pablo II nos deja la advertencia sobre la batalla que estamos librando entre la cultura de la vida y la cultura de la muerte. Caso reciente el de Terry Schiavo a quien mataron de manera cruel: de hambre y sed. Todo ello en el nombre de la justicia del hombre que juega a ser Dios. Un claro ejemplo del asesinato disfrazado que es la eutanasia. Juan Pablo II ha resumido el papel de la familia y del hospital en los cuidados paliativos: “Cuando la existencia terrena llega a su fin , de nuevo la caridad encuentra los medios mas oportunos para que ...los llamados enfermos terminales puedan gozar de una asistencia verdaderamente humana y recibir cuidados adecuados a sus exigencias en particular a su angustia y soledad.” No hay eutanasia cuando se omiten cuidados que son desproporcionados y no útiles para el enfermo.” Es decir cuidados que no dan mejoría, peligrosos, demasiado costosos, tratamientos que procurarían únicamente una prolongación precaria y penosa de la existencia. La dignidad de la persona y el valor de su vida no se miden por criterios de calidad. El único dueño de la vida es Dios. La vida por si misma es mas valiosa que una vida con ausencia de dolor. Nunca existe una vida inútil, por muy herida que este por el sufrimiento. Este es el horno donde se purifica el espíritu. ¿Quien dijo que la vida estaría libre de sufrimiento y dolor? Es parte del precio que hay que pagar por vivir. La mayoría de los pacientes que demandan la eutanasia casi siempre son peticiones angustiosas de asistencia y de afecto. “Ningún moribundo pedirá una inyección letal si lo cuidas con amor y le ayudas a arreglar sus asuntos pendientes.” “Si no podemos dar días a la vida, demos vida a los días” Claude Bernard.
El Papa murió dignamente rodeado de la familia que conoció: Sus colaboradores mas cercanos. Ellos y quienes pidieron por el le dieron consuelo, presencia amorosa que alivia conforta y cuida. Juan Pablo II se despidió de México por última vez el 2 de agosto de 2002, con una frase que parece repetirse ahora: "Al disponerme a dejar esta tierra bendita, llega a mi mente lo que dice aquella canción en español: me voy, pero no me voy. Me voy, pero no me ausento, pues, aunque me voy, de corazón me quedo. México lindo, que Dios te bendiga".Asi Concluyó el Papa en aquella visita.jesus50@hotmail.com